“Nadie regresa del infierno indemne.”
Durante la noche de celebración del fin de año chino en el madrileño barrio de Usera, que ya podemos considerar el Chinatown español, desaparece la inspectora Chesca Olmo, de la Brigada de Análisis de Casos. Ante las evidencias que muestran que su desaparición no ha sido voluntaria, sus compañeros de la brigada comienzan una carrera contra reloj para dar con su paradero. Las angustiosas revelaciones que encontrarán durante su investigación serán devastadoras, más aún cuando afectan directamente a todos debido a su relación personal con Chesca.
La nena es una novela bien montada. Novela negra con elementos de best seller que funcionan y que la hacen muy accesible para el público general, a pesar de los tremendos hechos que en ella se cuentan, con escenas que pueden revolver los estómagos más sensibles.
Esta es la primera novela que un servidor lee de Carmen Mola (ya sabrán ustedes que es un pseudónimo), a quien había oído nombrar pero no tenía yo en mi radar. Me da la impresión de que es un “producto” literario. Pero un producto muy bien elaborado, debo reconocer. No me cabe duda de que tras este nombre se esconde una escritora/escritor de cierto renombre, aunque, por supuesto, también puedo equivocarme. Incluso me llegó hace un tiempo un soplo de quién podía ser. Si es así, es alguien solvente, créanme.
Como decía, no tenía yo ubicada a Carmen Mola, hasta el punto de que pensaba que esta era su segunda novela, cuando en realidad es la tercera, tras La novia gitana y La red púrpura. En todas ellas, la protagonista es la inspectora Elena Blanco. Y es aquí donde encuentro el único punto criticable de la novela, pues al parecer la inspectora Blanco deja la policía tras los acontecimientos acaecidos en La red púrpura, y ahora vuelve, pero sin volver. Me explico: cuando le informan de la desaparición de su compañera, agarra su placa y su pistola, pero sin confirmar su regreso al Cuerpo Nacional de Policía de ningún modo. Algo así como “vuelvo, ayudo a encontrar a Chesca pero no te firmo nada, y cuando aparezca me largo de nuevo y aquí paz y después gloria”. Sus compañeros parecen tomárselo con toda naturalidad, pero lo cierto es que actúa como policía sin serlo, situación a todas luces imposible que el lector ha de creerse sí o sí para disfrutar de la trama que, por lo demás, es muy consistente con elementos que, ciertamente, se dan a diario e ignoramos conscientemente.
A destacar la ambientación, la descripción de situaciones y hechos, el retrato de una sociedad rural a medio camino entre la modernidad y el pasado, de una ciudad de provincias, Cuenca, que no quiere empezar a parecerse a una gran urbe como Madrid; de Madrid, donde nadie conoce a nadie, donde la gentrificación avanza imparable devorando todo a su paso. En definitiva, una buena novela que gustará al 99% de los lectores. Para los libreros, una apuesta segura cuando no sepan qué recomendar a un cliente indeciso o de gustos poco definidos.
Alberto Pasamontes
La Nena
Carmen Mola
Editorial Alfaguara
Año 2020
392 Pag.
ISBN: 9788420435985
Efectivamente muchas veces nos tenemos que creer ciertos hechos para poder asumir una novela. Eso es aceptable, pero no es bueno porque dice que el autor no ha encontrado una fórmula más creíble, más verosímil. Y te creo esa carencia en esta novela, que ha de mantener el pulso de ser para el gran público, algo que también haces notar.
ResponEliminaYo es esta la que todavía está en la lista de libros por leer, pero me he tragado las dos anteriores, y realmente me gustan, son vertiginosas, me parecen buenas novelas negras, y me alegra que hayan tenido el éxito que han tenido. Disfrútalas.