José Antonio Martín Otín Petón
Editorial: Córner
Edición: 2ª edición, julio de 2011
Nº de páginas: 190 pp.
I.S.B.N.: 978-84-15242-00-0
Fue y es futbolista, pero también frecuenta los programas deportivos de radio y televisión (Cope y Punto Pelota), representa a jugadores de fútbol (Torres, Pedro, Navas…) y es autor, entre otros, de “La desesperación del té”, libro sobre el mejor amigo de Lorca, Pepín Bello. Su amor por el Aleti le costó más de un disgusto y unas pocas alegrías, así que no resulta extraño que no solo sepa y entienda sobre fútbol, si no que conozca todas esas historias que han hecho de éste deporte el deporte rey, y por encima de todo, la forma en que nos las cuenta.
A medio camino entre la fábula y el cuento, Petón nos embauca con su prosa tanto o más que “Las mil y una noches”. Su escritura y sus historias están llenas de poesía, trenzada desde el inicio de ellas, cincuenta en total, y que poco a poco van subiendo su tensión, hasta finalizar con una palabra o frase certera que redondea dicha historia, muchas de ellas vivencias en primera persona del autor.
En el libro encontraremos a Serrat, Kubala, Gardel o Samitier, todos ellos ídolos contemporáneos, pero también la desgraciada historia del Torino, o el Manchester United, equipos convertidos en historia tras sendos y fatídicos accidentes aéreos, la peculiar relación del gran Bob Marley con el fútbol, la amistad de Gullit con Nelson Mandela o el por qué del enfado de Iván de la Peña para no querer pasar por delante del Corte Inglés de plaza Catalunya.
Infinidad de las historias podrían parecer inventadas, mentiras piadosas para entretener. Pequeñas fábulas engañosas que llevan nuestras mentes al más allá. Pero son ciertas como la vida misma. Todas y cada una de ellas. Desde las más a agradables, hasta las más atroces.
Posiblemente no estén todas, y un segundo volumen vea la luz en los años venideros, puesto que el fútbol es historia viva. Pero estas cincuenta historias podrían convertirse en los futuros cuentos que unos padres amantes del deporte cuenten a sus hijos antes de que estos se pongan a dormir, mientras unos y otros sueñan en llegar a lo más alto, como un día pude haber hecho el mismísimo Messi.
Puede que la información volcada en cada una de estas historias, resulte algo indigesta en algún momento, más que nada por no saber o no conocer de qué está hablando Petón realmente. Pero prometo que si seguimos leyendo, al igual que las parábolas que explicaba Jesucristo, al final conoceremos y aprenderemos algo sobre ella.
Instructivo, entretenido, sorprendente y por encima de todo ello, maravilloso, como la vida misma.
SALVA G.
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