Del 4 al 13 de Julio, llega la XXVII Semana Negra de Gijón, el festival de literatura negrocriminal por excelencia, hemos podido hablar con su director de contenidos, Ángel de La Calle y nos ha hecho un pequeño avance de lo que encontraremos allí.
¿En qué estado se halla la salud del festival, teniendo en cuenta que
no para de crecer?
La salud creativa, de ideas y
proyectos de y para el festival son de primer orden y de amplio espectro. El
único pero es, cómo no, el cada vez más exiguo presupuesto y la reducción de
aportes de las administraciones. No somos un festival de ocio, somos un
festival cultural, donde la promoción de la lectura y el debate de ideas es el
motivo final, sin renunciar a la mezcla de géneros y a seguir siendo un
festival callejero, comprometido y popular.
¿Qué previsiones de asistencia y participación tiene la Semana Negra?
Las previsiones siempre son las
máximas, ya habituales; cientos de miles de personas que pasarán durante los
diez días del festival entre las 5 de la tarde y las 3 de la madrugada.
¿Tiene todavía buena salud y futuro el género negro en un contexto de
crisis en el mundo literario importante?
Nunca tuvo el género negro tan buena
salud de mercado y crítica. Creemos que también de creación, pero esto lo dice
el trascurrir del tiempo. Como heredero de la novela social, del juego
literario y del realismo poético, el género negro es un vehículo privilegiado
para hablar de este mundo, desde el deseo y la rabia.
¿Cómo reciben los habitantes de Gijón el festival?
No lo reciben; mejor aún: entran
en él. Sin el apoyo masivo de esos cientos de miles de personas que llenan todos los días el
festival sería imposible haber sobrevivido a las durísimas campañas de algunos
sectores locales contra el evento y lo que ideológicamente representa. Por otro
lado, un festival que se reclama y vive en la calle ocasiona las inevitables
molestias que vamos solucionando según
cambiamos de ubicación.
¿Qué nivel de participación están teniendo los concursos literarios
convocados por ustedes?
Bueno. Solo convocamos Concurso
Internacional de relatos negros en castellano, que sigue, desde hace 27 años,
con una altísima participación pese a su pequeña dotación y con participantes
de todos los países donde se habla el castellano.
Otra cosa son los premios que se
fallan en la Semana Negra entre los que, por antigüedad, destaca el Premio
Dashiell Hammett de novela en castellano, otorgado por un jurado de escritores
y críticos y que es la referencia mayor del género en el mundo del castellano.
Pero este, como los demás, es a libros publicados el año anterior y no tiene
dotación económica.
Siguen ustedes dando mucho bombo a la ‘Ficción especulativa’ y las
‘Narraciones Fantásticas’ ¿Encaja este género bien dentro de los aficionados a
lo más negro?
Tal vez a algunos les encaje y
sean lectores de ambos géneros y a otros no, pero en la Semana Negra se habla
de novela histórica, de Historia, de literatura fantástica, de aventuras, de
periodismo y de poesía, además de cómic, pintura, cine o muralismo. Las
fronteras nunca están claras y no nos gustan. Preferimos abrir ventanas. ¿
Blade Runner es cine de ciencia ficción
o de género negro?
Este año han incorporado una ‘Carpa de las bibliotecas’ ¿Cuál es la
intención de este nuevo espacio?
Se llamará Carpa
Bibliasturias.com y vamos a añadir más temáticas al festival. Hablar de
urbanismo, acercarnos a los lectores más pequeños, a los que teníamos
desatendidos, a los jóvenes, a los clubes de lectura, a los problemas
editoriales, a los libros en otros formatos y a debates o presentaciones de
libros más cercanos territorialmente a la Semana Negra.
Destáquenos un par de eventos que le hacen más ilusión personal y un
par de gran importancia para el festival.
Es difícil hacer la separación,
pero me va a encantar presentar la nueva novela de Rosa Ribas y también hablar con el biógrafo de Jorge
Semprún, del que soy gran lector y al que tuvimos como participante en la Semana
Negra. El homenaje a Julio Cortázar, dividido, como los juegos que a él le
gustaban, en tres casillas o espacios. Y luego tengo el corazón partido entre
la mesa sobre la tortura y el homenaje a las mujeres del carbón. Pero esto es
como pedirme que elija entre mi padre y mi madre: una trampa.
¿Tienen los escritores españoles algo que envidiar a los del resto del
planeta?
Depende. Yo creo que no en
algunos casos, pero no se escribe en equipo, se escribe uno a uno. Luego estarsé de Un día volveré aso sabolta ¿y quuropa
que Montalbñ madre, una trampa.bbroscia ficcitores y cre . El a no venal a sus
segán las modas que ahora van por países.
No creo que haya mejores
escritores en Europa que el Montalbán de ‘La soledad del manager’ o el Eduardo
Mendoza de ‘La verdad sobre el caso Savolta’. ¿Y quién es mejor que el Marsé de
‘Un día volveré’ en el género negro mundial?
¿Nos podría adelantar algún país o territorio que vaya a emerger con su
novela negra en un futuro próximo?
Yo creo que Argentina, que este
año tiene una amplia representación en la SN. Si alguien sabe canalizar ese
cúmulo de potencia creativa y literaria puede ser el próximo país de moda. Ya
lo son entre los más perspicaces lectores. Falta el salto industrial, el
literario ya lo tienen.
Xavier Borrell