En diciembre de 1992, poco después del derrumbe de la Unión Soviética, Olga Merino (Barcelona, 1965) prepara las maletas para instalarse en Moscú como corresponsal de El Periódico de Catalunya. En la capital rusa Merino vivió cinco inviernos, en la vorágine de un cambio de época que marcó también un antes y un después en su vida personal.
De
aquella época le quedaron a Merino unas libretas que durante
su estancia en la capital Rusa hicieron las veces de diario personal. Treinta
años después, esas libretas, llegan al gran público bajo el título de Cinco inviernos de
la mano de Alfaguara.
Merino era joven,
inconsciente (no sabía nada de ruso) pero arrambló sus bártulos y para allá que
se fue. Su ilusión era ser corresponsal en latinoamérica, pero le ofrecieron
Rusia. No tuvo tiempo de pensar. Allí conoció lo que es la muerte, la
violencia, el sinsentido y el caos absoluto, y fue testigo de cómo un imperio
se derrumba. Todo era de color de rosa fuera del país, pero desde dentro todo
se tornaba gris.
Merino consiguió una
experiencia vital y personal tremenda. Pero también buscó su sueño desesperadamente,
algo que podemos apreciar a medida que el tiempo pasa a través de sus diarios.
Ser
escritora era para ella lo primordial. Leemos algunas de sus ideas en sus
diarios, tanto para cuentos como para novelas y damos fe que alguna de ellas se
adelantaron al tiempo.
Resulta
irónico que aquellas libretas que escribía a destiempo y sin ningún fin más
allá de la satisfacción personal, se hayan convertido en un excelente libro.
Pero
en Cinco inviernos hay algo más que esa inocente mirada de
la Merino de 1992: la perspectiva que da el paso del tiempo de
unos hechos no solo vividos, sino leídos años después. La propia autora comenta
sus escritos a modo de pequeños paréntesis literarios entre sus anotaciones en
estos Cinco inviernos recién editados.
Cinco
inviernos es más que un libro de memorias o un momento clave en la vida de
la autora, es un viaje al pasado, a un pasado que ya no existe, a un país que
no parecía el paraíso del que todos hablaban.
Hay
momentos históricos en Cinco inviernos: una visita a Chernóbil,
la guerra de Chechenia, o el asesinato del tío de la autora en el interior de
una pizzería de Barcelona (buscar caso Snoopy para más datos). Pero también y
sobre todo, instantes de una vida difícil por parte de la autora: la precaria
vida de los corresponsales y sus luchas por sobrevivir, la falta de autobuses o
taxis, la dificultad de comprar compresas, el temor a quedarse embarazada, el
amor a los escritores rusos, al ballet, o al idioma, aunque se hizo lo que se
pudo.
Cinco
inviernos resulta un ejercicio de memoria digno y ameno en su lectura, las
entradas siempre resultan interesantes tanto desde el punto de vista
periodístico, como desde el punto de vista personal, y comprobamos página a
página cómo se forja, primero una persona, y después una escritora.
SALVA
G.
Título: Cinco inviernos
Autor: Olga Merino
Editorial: Alfaguara
Edición: 1ª edición, enero de 2022
Número de páginas: 248
I.S.B.N. 978-84-204-6096-3