Aunque hace ya más de 18 años que el autor murió, fue un 2 de julio de 1999, y que su última novela, Los Borgia, escrita de su puño y letra, fue terminada y revisada por su novia en aquella época, la escritora Carol Gino y editada póstumamente (Omertà también lo hizo, pero la historia fue acabada por el propio Puzo antes de su fallecimiento) una nueva novela nos llega de la mano de Navona Editorial.
En realidad no es tan nueva, ni siquiera su traducción al español. Originalmente el autor la publicó en 1965 con el título de The Fortunate Pilgrim, y Ediciones Grijalbohizo lo propio en nuestro idioma en 1971 bajo el título de La Mamma. Pero sin duda se disfruta tanto o más de que si estuviéramos hablando de una obra inédita.
Pongámonos en situación.
Mario Puzo edita un libro, su primera obra, La arena sucia. Corría el año 1955. No muy contento con el resultado, comenzó la escritura de la que sin duda él creía, sería su mejor obra. Aquella que le llevaría a la cima. Le consagraría como un escritor y le reportaría fama y dinero. La Mamma tardó diez años en escribirse, se editó en 1965 y Puzopuso en ella algo más que palabras. Su propia vida podía ser leída en cada una de las frases de la novela. Ésta acabó siendo una biografía de su madre, la auténtica heroína del libro. Pero tras su edición no ocurrió nada. Es más, Puzo necesitó dos trabajos para poder llevar el dinero a casa y alimentar con él a su familia. Personalmente siempre creyó que ése era su mejor libro. Su obra cumbre. Su pilar donde sustentaría toda su obra. Pero no. Puzo tuvo que sentarse y hacer frente a la realidad. El público no compró el libro y aunque las críticas fueron favorables, con eso no se comía.
Tras la decepción, Puzo como reacción se dijo: debo escribir un best seller.
Cuatro años después entregaba al mundo El Padrino. En él transcribía las historias que su madre, la protagonista de su anterior libro les contaba mientras los chicos crecían. Lo consiguió, su best seller fue un bombazo, y le había hecho rico y famoso. Algo que tres años después acabaría multiplicándose tras su versión cinematográfica que además de reportarle más beneficios económicos con la venta de su novela, le hizo conseguir un Oscar al Mejor Guión adaptado junto con el director Francis Ford Coppola.
Todo un éxito personal, pero para nada profesional, Puzo pensaba que La Mamma era superior, no solo a El Padrino, si no a cualquiera de sus posteriores obras, incluso como bien especifica el fajín de esta edición, en una de sus últimas entrevistas se mostró triste por la repercusión que tuvo El Padrino, que opacó a La Mamma.
Y ¿qué nos encontramos en dicho libro?
Lucia Santa abandona su Italia natal y emigra a Estados Unidos buscando un futuro más prometedor. En Nueva York le espera su nuevo esposo. Allí deberá luchar contra la pobreza y la desdicha. Pero las dificultades no acabarán con ella. Tras la muerte de su primer marido que la deja con tres hijos y tras casarse nuevamente y tener tres hijos más, y encerrar a su segundo esposo en un siquiátrico, Lucia Santa luchará con coraje, pasión y mucha dignidad para defender a su familia.
Su hija mayor quiere seguir las tradiciones del nuevo país. Su nuevo marido o quiere por igual a sus seis hijos. Sus tres hijos biológicos tienen mejores números en la rifa del cariño que los tres más mayores. Uno de sus hijos sale algo rebelde. Incluso el mayor de ellos se casa con una pobre chica italiana a la que en cuanto puede le hace el salto. Y por supuesto en su vida ocurrirán desgracias más relevantes.
Mario Puzo (New York, 1920) escribe con mano firme una historia sobre superación de una familia de emigrantes en un país extraño que bien podría ser la suya propia. Esa Lucia Santa podría ser su propia madre, y seguro que muchos rasgos y tics son de ella, lo único que nos queda averiguar es cuál de los hermanos es el verdadero Puzo.
Durante cinco años el autor nos cuenta las vicisitudes de esta familia. Lo difícil que fue adaptarse al nuevo país, las penurias que sus miembros pasaron para poder llevar la comida a la mesa, aunque ésta solo fueran espaguetis con albóndigas y salsa de tomate, y los trabajos que tuvieron que realizar para ello.
Sí, Puzo tenía razón, es posible que El Padrino sea su obra más conocida, parte de culpa de ello lo tiene la excelente versión cinematográfica que se realizó de ella, pero En tierras extrañas, no solo es su mejor obra, si no la más personal de todas, la más sentida y la más redonda. No sobra en ella ni una coma. Y el coraje y la lealtad del Don vienen de ella.
SALVA G.
Título: En tierras extrañas
Autor: Mario Puzo
Traducción: Ernesto Mallo
Editorial: Navona Editorial
Edición: 1ª edición, octubre de 2017
Número de páginas: 350 pp.
I.S.B.N. 978-84-17181-03-1